Venezuela quiere convertirse en una potencia energética mundial. La revolución del gas socialista es considerada uno de los elementos esenciales de los cambios económicos que se realizarán en el país. El objetivo principal es garantizar el suministro al mercado interno y el apoyo a países vecinos, con miras a la integración gasífera.
Diez proyectos conformaran la Revolución, entre ellos la construcción en todo el país de nueve plantas comunitarias de llenado de bombonas, las cuales serán manejadas por las comunidades.
El aumento de los recursos se destinará al plan de gas vehicular, al proyecto de gasificación de las ciudades, al desarrollo de la industria petroquímica y a la generación termoeléctrica, entre otras cosas.
El Gobierno nacional invertirá un total de 10 mil 322 millones de dólares para el desarrollo de estos proyectos, a realizarse entre los años 2008 y 2014, con lo cual se incrementará en casi 40% la capacidad instalada de generación eléctrica en el país. El monto señalado no incluye la inversión destinada a proyectos eólicos, de energía solar, de gasificación, ni tampoco de otras 800 obras destinadas a mejoras de distribución, para las cuales aprobó un crédito adicional de 500 mil millones de dólares.
Con la construcción del Complejo Hidroeléctrico Manuel Piar, en la población de Tocoma, en el Estado Bolívar, el río Caroní ahora poseerá en su trayecto cuatro centrales hidroeléctricas: El Guri, Macagua, Caruachi y Manuel Piar.
Con la creación del III Desarrollo de la Central Hidroeléctrica Fabricio Ojeda, ubicada en el municipio Padre Noruega, estado Mérida, se aprovecharán diversas zonas del territorio nacional para la generación de hidroelectricidad, con lo que se contrarrestará la enorme responsabilidad que actualmente posee El Guri, generador de 72% de la electricidad nacional.
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